¡Encantada de conocerte!

Noëlle, 29 años. Artista de manos pequeñas. Madre de plantas y de un perro llamado Ficus. Ilustradora, diseñadora gráfica, fotógrafa aesthetics y bloguera desde la cuna.

¿Qué quieres leer?

Nos vestimos de Navidad



¡Hola, hola! A falta de un mes para estar cantando villancicos y comiendo turrón hasta acabar redondos os quiero presentar la decoración navideña de nuestro querido hogar. La primera decoración navideña. Son nuestras primeras navidades en este piso y las cuartas que pasamos juntos, así que la ilusión es desbordante.

Aún así no queríamos gastar mucho dinero en poner un árbol (cosa indispensable porque mi novio, en 26 años de vida, jamás había puesto uno en su hogar. Celebran la Navidad, sí, pero sin poner árbol o decoraciones así que él se moría por decorar su primer arbolito y yo me he muerto de verle tanto brillo en los ojos). La semana que viene estamos en Londres (con una maleta medio vacía porque quiero comprarme mil cosas) y... en general tampoco teníamos en mente derrochar más en la decoración que en los regalos en sí. Las luces ya las teníamos porque, si hay algo que le gusta a Àlex además de yo (obvio) y la comida, son las luces. Los ambientes con lucecitas. Vamos, que estamos en pleno apogeo de ambientazo navideño en casa. Y la mar de felices.

Nintendo 3DS Haul + Nuevo bebé



¡Hola, hola! Creo que no puedo ser más feliz. Podría intentarlo... quizás añadiendo un par de calcetines nuevos, pero igualmente tengo el listón muy alto. Supongo que sabéis de sobras que soy una friki. Friki, nerd, gamer, viciada... como queráis llamarlo; yo seguiré miope y enganchada a una consola y/o pantalla de ordenador.

Soy una friki de esas nostálgicas. ¿Los juegos? Contra más pixelados mejor, por favor. Algunas de mis grandes hazañas en la vida han consistido en instalar un juego noventero en un Windows 7; juegos como Roller Coaster Tycoon, Simon the Sorcerer, Maniac Mansion o, por favor, Age of Empires. También tengo un muy querido simulador de Game Boy Advance con más juegos de los que soy capaz de jugar (por cuestión de tiempo, no de ganas). Y aunque ahora vivo con una Play Station 4 (que venía adherida a las manos de mi novio) se podría decir que si hay algo que me caracteriza es que soy Nintendera. ¡Nintendera a muerte!

DIY: Alfombrilla de ratón

¡Hola, hola! ¡Hoy os traigo un DIY! ¡Hurra! Hacía tiempo que necesitaba/quería una alfombrilla de ratón y, después de encontrar un tutorial sencillo por Pinterest dije: ¡No quiero una alfombrilla de ratón cualquiera! ¡Quiero la más cuqui que exista! Y para ello tenía que confeccionármela yo misma.



Pero tranquilos, es SÚPER sencillo. De hecho os invito a que lo hagáis si el ratón os baila sobre la mesa y vuestra alfombrilla es inexistente o empieza a estar desgastada (o no es tan bonita como desearíais). Lo bueno de este DIY es que cubre una necesidad y además es 100% personalizable. Rápido y barato. ¡Vamos allá!

La caja

Como os dije en la entrada de "Postales a Joana"... yo tengo una caja. A priori podríais decir que es una caja barata de los chinos pintada de blanco y forrada con una tela vieja... y estaríais en lo cierto. Pero es mucho más que eso. Es más que una caja, es LA caja.

La caja fue el resultado de un proyecto de bachillerato en el que teníamos que expresar un sentimiento en formato "caja". Esta caja es "cariño".



Para mí supone muchísimo abrir la caja en público. Bueno, de hecho tuve que exponer el proyecto delante de toda la clase así que no será la primera vez. Abrir esta caja es... como desnudarme. Emocionalmente. Algo un tanto peculiar para un "robot" desconfiado e introvertido como yo. Pero quiero hacerlo, quiero abrir la caja. Quiero que conozcáis un poco más a la persona que tengo encerrada dentro. Y, ya de paso, quiero viajar al pasado para recordar la persona que soy.

Journal: Domingo 13

¡Hola, hola! ¡Oh! ¡Cuánto tiempo! Vale, sí, ayer también me dejé caer por aquí pero no me refería a eso. ¡Cuánto tiempo sin utilizar el blog como un diario! ¡Cuánto tiempo sin darle vidilla a la etiqueta "Tiempo"! Vale, de acuerdo, ayer también blogueé con esa etiqueta sólo para comentar el nuevo diseño de este rincón pero basta de boicotearme a mí misma.

Hoy no os vengo a hablar de nada en concreto ni de nada trascendente (como si alguna vez escribiera algo que no fuese banal... já). Hoy vengo a recuperar un poco el propósito por el cual empecé esta "aventura" allá por el 2011: escribir lo que me da la gana y cuando me da la gana. Y hoy me apetece hablaros de mi día, domingo 13 de noviembre de 2016.

Si es que te lías

Después de decir que iba a cambiar el diseño para luego más tarde comentar que lo iba a dejar tal cual y a centrarme en crear contenido... me he liado. Es un término que utilizamos mucho en el trabajo: "si es que te lías". Y yo, anoche, después de una jornada de ocho horas, me lié a toca…

Socks Haul

¡Hola, hola! Sólo unos días más tarde de hacer pública mi codiciada colección de tazas os traigo una colección aún mayor. Perdón, ¿he dicho colección? Quería decir acumulación. Hoy os quiero presentar mi gran e inacabable montaña de calcetines.


Mi colección de tazas (en continuo aumento)

¡Hola, hola! Primero de todo: lo siento. Sé que hablé de rediseñar este pequeño rincón pero esta semana, en pleno auge de la peor gripe que he tenido en años, me he dado cuenta de que no me acababa de convencer el cambio que estaba realizando y he decidido parar motores. Pero eso no significa que este diseño vaya a prevalecer hasta el fin de los tiempos, todo lo contrario: en cuanto pueda compraré un dominio para este pequeño blog y cambiaré incluso el nombre.

Pero por ahora me voy a centrar en lo que me gusta hacer: bloguear. Contaros mi insulsa vida; lo que me gusta, lo que odio y lo que hago o dejo de hacer. Voy a centrarme en crear contenido porque últimamente tengo mucho que decir y enseñar al mundo como para enquistarme en borradores por tener un poco de "cacao mental artístico y programador". Dicho esto, y volviendo a repetir que oh Dios, casi muero entre mocos literalmente, pasamos a la entrada de hoy:

¡Tazas! Mi incomprensiblemente extensa colección de tazas que va en aumento. Este fin de semana me he comprado una taza y me he dado cuenta de que... tengo un problema. Y bastante serio. Es decir, tengo tropecientas mil tazas, más de las que necesito, y aún así si me enamoro de una NECESITO comprarla. No platos, no cucharas... ¡Tazas!

Y esta irracionalidad que me invita a comprarme varios modelos de algo que ya tengo y no necesito se aplica también a los calcetines (próximamente) y a las libretas. Quizás debería avergonzarme, cerciorarme de la cantidad de dinero que he invertido en tazas (y no en montar un negocio o algo) y meditar pedir ayuda para tratar tal compulsión. Pero no, en vez de eso voy a presumir de mis bebés. Os presento a mi querida colección de tazas:

¡Click en las imágenes para admirar el tamaño completo!


Formulario de contacto

Nombre

Correo electrónico *

Mensaje *