En mi cabeza tenía cientos de títulos disponibles para encabezar esta nueva entrada en el blog (sin recurrir a una canción de Amaia). Todos ellos hablaban de comienzos, cambios... incluso llegué a contemplar la idea de titularla como "Llegar a la meta". No sé cómo sintetizar la ilusión, la felicidad, la nostalgia y el vacío que me recorren por las venas ahora que he visto cumplido un sueño, uno de los más grandes que coronaban mi horizonte.
Quiero aprovechar este rincón, mi ventanita al mundo, para contaros más sobre este sueño hecho realidad.
El tiempo carece de toda lógica cuando cierro los ojos y puedo recordarnos nítidamente durmiendo en una cama individual, alternando la suya con la mía. Mi boca plateada por la ortodoncia sonreía cada vez que lograba una noche en sus brazos. 2014, apenas llevábamos un añito enamorados y aún podíamos celebrar los meses sin perder la cuenta. Yo, más veinteañera que treintañera, acababa de entregar mi trabajo final de grado concluyendo así con mis estudios que me titulaban como diseñadora gráfica. Él, siempre tres años por delante (que nunca espero alcanzar), luchaba por encontrar "algo de lo suyo" mientras volvía a casa con la espalda destrozada por cargar cajas del Decathlon.
Y en aquel momento, en el que compartíamos plato en los restaurantes para pagar menos, lo de comprarnos una casa juntos se nos antojaba lejos y complicado. Una montaña muy afilada difícil de escalar. Pero todo llega.
Fantaseaba con cómo sería. A qué cimientos me ataría una hipoteca. Jugué con todas las opciones posibles en Los Sims. La única constante éramos nosotros (y, con el tiempo, Ficus). Tuvimos un ático de infarto y una casa con piscina. Cocinas del mismo tamaño que una pista de atletismo, lujosas salas de juegos con televisores que te desprenderían las córneas a menos de diez metros. Lo tuvimos todo en mi imaginación. Me enamoré de anuncios de Idealista que llegué a guardarme en forma de capturas, ilusa de mí. Por si tocaba la Primitiva y la masía de lujo recién reformada de un millón de euros podía ser un sí.
Imaginé todas las posibilidades, pero la realidad y las necesidades (que se aposentan y se endurecen con el tiempo) me llevaron hasta el que ahora hemos bautizado como El Castellet. Nuestro castillito.
No está en la ciudad a la que juré amor eterno desde la cuna hasta la tumba. No está para estrenar ni aislada de vecinos que a veces puedan resultar molestos. De hecho, aún a día de hoy (22 de septiembre) en el que cumplimos un mes durmiendo bajo este techo, la casa es más de las arañas que nuestra.
Pero es nuestra, con todas las letras (las que le debemos al banco). Es más de lo que podía soñar, con los pies en el suelo, cuando crecí en una estrecha habitación con vistas a un patio de luces. Ahora tenemos vistas a un bosque de pinos que siempre nos regala una brisa fresca, habitaciones de sobra para ser una familia y el porche de madera que nos enamoró desde la foto menos agraciada de Idealista.
Tiene todo el potencial para ser el hogar ambiciosamente aesthetics con el que se me hace la boca agua. Aún con la pequeña reforma de lavado de imagen terminada, aún queda mucho trabajo por hacer. Sin embargo, no podía resistirme a inaugurar esta nueva temporada de ilusión, trabajo y entrega por el contenido bonito sin un pequeño tour con distancias cortas. Con el objetivo de 50mm y un día lluvioso acorde a esta bienvenida al otoño quiero enseñaros un poquito más de El Castellet, de este proyecto de vida.
Bueno, es que vaya chapa os he dado hasta llegar aquí, ¿no? Puede que algunos rincones ya os suenen si me seguís en
Twitter y/o
Instagram (¡os lo recomiendo encarecidamente para no perderos nada!), incluso en redes lo habréis visto con
mayor nitidez que no con estos planos tan cercanos. Pero me hacía ilusión recrear el
New Home Preview que hice cuando nos mudamos hace cuatro años y medio a nuestro antiguo pisito.
Detalles, desenfoques y un primer vistazo. Con un poquito de mayor calidad, eso sí.
¡Que los años pesan!
El salón ya estaba recién pintado (mayormente) de blanco, actualizado para favorecer la venta de la propiedad. Fue de los primeros espacios en los que pudimos empezar a despojarnos de cajas y trastos, y aún así las lámparas siguen en el suelo en vez de en el techo. La diferencia de tamaño respecto al piso es abrumadora al conservar los mismos muebles de entonces. Todo está muy vacío aún, incluso con lo muchísimo que ocupa el león blanco. Quiero cortinas pero no estoy preparada para preguntarme cuánto costarán cuatro metros de cortinas.
Al no estar reformada probablemente no conocíais nada de la despensa, pero incluso en su estado actual es de mis lugares favoritos de la casa (spoiler: diré esto de todos y cada uno de los rincones). Poder almacenar más comida y sobre todo de una manera más organizada, con todo a la vista y sin tener que ponerme de cuclillas frente a un armario esquinero, es más de lo que podía desear. En este primer vistazo me he olvidado de adentrarme a fondo en los lavabos (el upgrade merece entrada propia) ni en las habitaciones sin reformar, pero no podía faltar el vistacillo a la despensa por poco aesthetics que sea.
Tengo más y mejores fotos de la cocina, fotos que le hacen más justicia, pero en el trajín del día a día la he inmortalizado por primera vez con réflex así. Bueno, ni tan mal. Éste sí que es mi lugar favorito. Tan nuevo, bonito y resultón con pocos cambios. El verde menta de los armarios con el mármol blanco, ay. Cuando eliges cosas llamativas como un suelo vintage de aspecto recargado tienes un momento de duda en el que dices "ay, que me la voy a pegar". Nah, quien no arriesga no gana. Bajo mi punto de vista es el mejor suelo del mundo mundial.
Y además camufla súper bien las bolas de pelo de Ficus.
La cocina se une al salón mediante un distribuidor (donde se encuentra el aseo de la planta principal -no reformado pero con WC nuevo- y la despensa). Desde la cocina vas al patio, así que ésta recibe toda la calidez de la vida en el porche. Nos gustó mucho esta distribuición porque garantiza una buena comunicación entre las zonas de comidas y cenas. El patio es largo pero carece de personalidad y cuidado. Le salvan los porches de madera (el segundo, el del fondo, con la barbacoa de obra que ya está enamorando a nuestros amigos), las plantas que estamos poco a poco recopilando y la guirnalda de luces que aún es demasiado corta para mi gusto. Hay muchas ideas para hacer de este patio un oasis más allá de ser la explanada de los correteos de Ficus. Falta arremangarse mucho, sudar un montón y seguir invirtiendo esfuerzo y dinero en él, pero con el tiempo será el patio de todos los patios. Nada que envidiarle a los jardines del Palacio de Versalles, ya veréis.
Subiendo escaleras nos separamos de la vida social que aporta el porche y el salón y nos adentramos en las habitaciones. Trabajo y descanso. Intimidad, zona no apta para visitas. Hay cuatro en total (sin contar la buhardilla). Una de ellas es la que contiene el baño suite (el rosa, el "mío") y está a la espera de pintemos sus paredes y las puertas del armario empotrado. Lo de despertarme con vistas verdes aún tardará unos días en llegar, pero al menos ya tengo el altar de potingues que siempre había querido tener. Al igual que el otro lavabo (el azul, el general de la misma planta), les reservo una entrada propia para hablar de reformas low cost y de cómo quitar el boomer de una casa sin morir en el intento.
La otra habitación más o menos enderezada es el despacho de À. Aún faltan algunos detalles pero ya puede utilizarla para trabajar cómodamente con unas vistas privilegiadas hacia el pueblo. En su caso ya tenía más o menos normalizado teletrabajar de vez en cuando (sobre todo en cuanto a horas extra se refiere); con la situación actual lo de volver a las oficinas suena lejano (por fortuna) y es uno de los motivos de peso por los que empezamos a pisar el acelerador para encontrar un nuevo y definitivo nido. Antes, en poco más de sesenta metros cuadrados, conciliar vida y trabajo no era nada fácil. Ahora al menos puede desconectar sólo con dar unos pasos. Esta calidad de vida no tiene precio.
Finalmente, y obviando que nos hemos saltado el recibidor y el garaje (zona cero catastrófica ahora mismo), subimos hasta la buhardilla. Ay, *suspiro*, mi buhardilla. Así como la canasta en el patio junto a la barbacoa de obra fue lo que más enamoró a À (además del porche que nos conquistó a ambos) yo tenía el ojito puesto al potencial desaprovechado del último piso de la casa. ¡Buhardilla con terraza privada!
Vacié los armarios empotrados (súper hondos) llenos de trastos de la anterior y despreocupada familia. Pinté con mis propias manos sus puertas de rosa como si de una bandera en la cima de una montaña se tratase. "Éste es mi territorio". Por casualidad fortuita, encontré más útil dejar los escritorios sin estar pegados a la pared. Tengo unas bonitas vistas sólo con apartar la mirada de la pantalla del ordenador y espacio más que suficiente para crear y hacer realidad todos mis proyectos.
Es el lugar,
el nuevo lugar, desde donde pienso escribiros mucho. Quiero inspiraros, ayudaros, entreteneros y haceros toda la compañía del mundo. Este rincón servirá de puente para transmitiros parte de mi día a día, del
slow life que quiero predicar. Interiorismo y decoración,
recetas,
skincare,
moda y alguna que otra
review de lo que surja.
Patreon seguirá siendo
mi refugio en el que encontraréis
contenido premium como el house tour completo
(en vídeo) de este hogar, podcasts, muchos consejos útiles y autocuidados, capítulos extra de
Ryu y manos manchadas de pintura. Además, la suscripción a
Patreon supone apoyarme económicamente,
tacita a tacita, para que pueda seguir creando y mejorando mis herramientas de trabajo.
Si os ha gustado este reinicio de blog y saber un poquito más sobre nuestro nuevo hogar os aconsejo seguirme la pista de cerca en
Twitter e
Instagram,
¡que no sea porque no os lo he recordado!
Quiero concluir esta entrada con la imagen del
cielo estrellado que pude capturar desde la terraza.
Os merecéis todo el firmamento. No tengo palabras para agradeceros lo arropada que me he sentido durante estos últimos meses llenos de altibajos. Todo lo bonito de este proceso también lo tiene de estresante y agotador. Gracias por los
"cafés" para llenarme de energías, por los mensajes y por vuestra curiosidad e interés. Gracias a las que lleváis ya tantos años conmigo, viviendo cada momento y brindando virtualmente en cada victoria. Gracias a los ojos grandes y despiertos que acaban de llegar y que espero que se queden por muchos años más.
Gracias. Os quiero.
Soñad a lo grande y muy fuerte, que (con esfuerzo y perseverancia) todo llega.
¡Me ha encantado! ¡Que fotos más bonitas y cómo se nota la ilusión en tus palabras! Precioso todo ❤️
ResponderEliminar¡Muchísimas gracias Marta! ¡Un fuerte achuchón!
EliminarMuero de amor con cada detalle de tu hogar, porque es HOGAR con mayúsculas. Brindo por todo el contenido nuevo que va a llegar, por un Patreon lleno de cositas, por este rincón que seguirá floreciendo, por tus ilustraciones que son magia pura, por lo aesthetics que tienes las rrss... Pero sobre todo por ti, porque no has parado de luchar ni un segundo, y has vencido. Y por muchas victorias más.
ResponderEliminar¡Besos!
¡Muchísimas gracias, Alba! Jo, me han emocionado muchísimo tus palabras, de verdad. Eres un SOL. Espero estar a la altura y seguir compartiendo mucho contenido y que os guste mucho mucho. ¡Gracias por todo! ¡Un besote!
EliminarQué preciosidad de nuevo hogar, me encanta el mimo con el que cuidáis de todo. Desde que me percaté de las cosillas que ibas subiendo respecto al nuevo lugar me piqué a las actualizaciones diarias por redes, desayunar mientras veía tus stories se convirtió en un ritual, y lo más gracioso: Mi pareja se ha acabado picando también y ha tenido que seguirte para poder continuar viendo las actualizaciones mientras vivamos en ciudades diferentes jaja.
ResponderEliminarMe alegro muchísimo por vosotros, los tres sois una pequeña familia muy bonita :)
AY, QUE ME MUERO JAJAJA ¡Me encanta! Espero poder seguir sorprendiéndoos porque hay muchísimo trabajo por aquí (y un gran cambio en marcha). ¡Gracias por seguir tan de cerca todo este proceso y por escribirme estas palabras! ¡Un fuerte achuchón!
EliminarMe encanta todo lo que tiene que ver con tu nueva casa. Es súper bonito cómo hablas de ella y estoy deseando leer el post de reformas lowcost ��
ResponderEliminar¡Muchas gracias Mery! Prepararé con muchísimas ganas el post para que más gente le dé una oportunidad a los hogares de segunda mano. ¡Un besote!
EliminarNo sé si es la regla, que te quiero un montón o ambas, pero casi lloro de la emoción al leerte. Me hace tan feliz que hayas logrado uno de tus sueños que es casi como si me hubiera pasado a mí.
ResponderEliminarSé que vais a hacer de esa casa un hogar m á g i c o y qué más pronto que tarde podré ir a verte y a tomar un vinito blanco en ese porche ♥
Ay, yo también te quiero un montón. Parece que fue ayer mismo que tomábamos una cervecita en una terraza del norte, ahora podría ofrecértela en casa (cosa que en el piso... poder se podía, pero apretujaos). O bueno, vino blanco, lo que se nos antoje. ¡Gracias por todo, amor! ¡Besotes!
Eliminar¡Holi!
ResponderEliminarMientras espero a que salga mi cena del horno vengo a dejar mi huellita por aquí; voy a acabar tatuándome el “todo llega” en un brazo a ver si pasa, me da paz saber que después de todo lo andado habéis conseguido llegar a dónde estáis hoy, en El Castellet <3
Tiene que dar muchísima impresión mirar atrás y recordar esos momentos de habitaciones pequeñas y camas individuales, evolucionando en un pisito de alquiler y ahora en un castillito. Vuestro castillito.
Acabo de ver un anuncio en Idealista de pisos de obra nueva sobre plano, edificio al lado de las Glories, con piscina y gimnasio comunitarios, con portero, con aparcamiento con cargadores para coches eléctricos… el más pequeño y modesto, más de medio millón de euros. Lo he guardado como favorito claro, todo llega (JAJA NO). Ahora si me toca la lotería tengo dos pisazos entre los que debatirme, pero no me engaño, la piscina gana.
Os está quedando la casa preciosa, preciosa, preciosa y a pesar del cansancio, de las agujetas, ¡Y DE LA LLUVIA ETERNA! Se te ve súper feliz, y eso no te lo quita nadie. Me encanta ver los cambios Idealista VS Ahora que estás poniendo en IG, y me das ganas de jugar a los sims jajaja
El suelo de la cocina yo no hubiese tenido HUEVOS a ponerlo, en serio, PERO QUEDA TAN BIEN. Que ojo tienes jodía.
Estoy deseando ver que cositas vas a ir creando en ese súper despacho rosa, con esas vistas el éxito está asegurado.
¡¡UN BESOTE ENORME Y WELCOME AL BLOG!! PD: Ponte recta.
Tatúatelo pero en la frente: TODO LLEGA. De verdad de la buena, ¡sin agobios! Porque acabará llegando. Vi precisamente el mismo anuncio de Glòries y casi me ahogo con mi propia saliva al ver los precios (además de que no incluye la cuota de comunidad... ¡que las comunidades con piscina son carísimas!). ¿Lo mejor de El Castellet? No pagaré comunidad en LA VIDA. Yo sigo teniendo la fe de que (por milagro) acabemos compartiendo pueblecito. ¡Nunca se sabe! Cuando esperaba a tener las lleves (espera eterna) empecé a recrear la casa en Los Sims... quizás debería continuarla jejeje. ¡Gracias por pasarte siempre y por ser como eres! *Me pongo recta*. ¡UN BESOTE!
Eliminar¡Hola!
ResponderEliminarAyer te leí y no tuve tiempo para escribirte. Como te digo hacía muchíisimo que no te escribía pero no puedo alegrarme más por lo que has conseguido. El tener una casa propia es un sueño al que aún aspiramos unos cuantos y yo de momento sólo miro en idealista esperando el momento oportuno o la casa soñada. Hubo una. No muy lejos del trabajo de mi pareja y en la zona en la que yo quiero vivir. Una casa de una planta con jardín y terraza a un precio asequible. Pero con solo seis meses de convivencia es un compromiso muy alto y se lo llevaron *agita el puño con ansias de venganza*. Ahora sólo miro por tener un poco claro qué buscamos y, como dices tú, por si toca la primitiva (una de mis zonas soñadas es de las caras de Santander, cómo no).
De verdad que estoy encantada con ver los pasos que das en la reforma y en que al final tengáis vuestro castillito. Espero ver más sobre consejos de decoración y el aesthetic y, por cierto, ESE SUELO DE COCINA. Me encantan ese tipo de suelos, incluso yo estuve mirando los de baldosas "portuguesas" (?) pero jo, es que queda genial. Y la mesa de la cocina y cómo combinas también me parece un sueño. Consejos de decoración, ¿para cuando?
¡Un besín!
¡Hola! ¡Gracias por sacar un ratito para escribirme! ¡Siempre me hace mucha ilusión leeros! Muchas gracias por tus palabras, de verdad que cuando menos te lo esperes llegará este momento tan bonito como estresante. Cada mes incluiré posts sobre decoración, ojalá la casa vaya evolucionando poco a poco y pueda incluir mejoras para compartirlas por aquí (falta dinero y tiempo en caso de optar por lo más económico -hacerlo a mano-). Yo el tipo de baldosa que buscaba era el típico modernismo catalán llenó de rococó, figuras y estampados. Eso sí, con un poco de color neutro para que no nos sature. Estoy TAN feliz con la elección que hicimos... ¡es que además se limpia súper bien! En cuanto termine de responderte te compartiré un nuevo post sobre decoración que espero que te guste un montón. Gracias por todo, Gema. ¡Un besote!
Eliminarme encanta!!!
ResponderEliminar¡Muchas gracias!
Eliminar¡Ay, qué ganas tenía de esta entrada! He esperado a leerla, porque quería leerla bien, en condiciones. Ya te he ido comentando por Twitter cada vez que has ido subiendo cosas de la nueva casa y he vivido vuestra ilusión como si fuese mía.
ResponderEliminarYa sabes que me encanta la delicadeza que tienes para decorar y poner todo tan bonito, te envidio mucho y las fotos son sublimes. Con poca cosa haces magia! Sigo esperando tus consejos de decoración, son realmente necesarios.
Muchas gracias por compartir estos cachitos de tu vida, y por darnos esperanzas a gente como yo a conseguir una mínima parte de lo que vosotros habéis conseguido.
Un besazo :)
Jo, ¡muchas gracias Tania! Me alegra un montón verte tan ilusionada con todo este proceso. Ya verás como también llegará para ti (¡y yo me emocionaré un montón y desearé verlo todo con mi ojito cotilla!). Ahora en breves publico un nuevo post sobre decoración "verde" que espero que te resulte súper útil, ¡cada mes haré un huequito para hablar de decoración por aquí! Estoy disfrutando mucho de mirar, rebuscar y encontrar muebles y accesorios para acabar de vestir esta casa (que sigue taaan vacía), tenemos material para años. ¡Te mando un fuerte achuchón!
EliminarQue felicidad siento por ustedes! Me la he pasado siguiendo las actualizaciones de ig y twitter. Y los videos de ficus corriendo 🥺
ResponderEliminarLa casa está quedando preciosa, me hizo mucha gracia cuando mostraste las encimeras boomer 😂 aquí aún están un poco de moda y me parecen horrendas.
Los mejores deseos para ustedes chicos, un abrazo grande hasta El Castellet ❤️
¡Muchísimas gracias Annie! Jajajaja el vómito de leopardo ya es historia, aunque aún tengo cositas boomers por aquí que tienen que ir desapareciendo, ya os enseñaré. Gracias por seguir la pista de este proceso y por tus palabras. ¡Un abrazote!
Eliminar