Nuestro primer beso fue de risa. Después de todo un maravilloso día de primera cita en que caminamos sobre la fina línea que separa "amigos que se gustan" de "sólo puedo pensar en ti", casi temblando te dije que no me podía imaginar cómo sería dejarnos llevar por la tentación. Tú dijiste una frase de película, algo así como "¿por qué no lo comprobamos?" antes de abalanzarte sobre mis labios, y yo me reí. Una milésima de beso, una eternidad muerta de vergüenza. Ya van 10 meses desde aquel beso.

Comentarios
Publicar un comentario