Empiezo la semana recordando una de las escenas de Billy Elliot: I love to boogie. Anoche vi la película (que me regaló mi chico por mi último cumpleaños) y me encanta. Cada cierto tiempo tengo la necesidad de verla, es la película dominguera por excelencia. Y no importa cuántas veces la haya visto, siempre me hace sonreír :)
Comentarios
Publicar un comentario